
Sirva un corto ejemplo: el sabado 17 pasado, el Embajador salio como de costumbre a ver, desde “Los Álamos” su querida imagen del Castillo y de la Atalaya y observó desde tanta distancia que de la cruz habitual situada en su cumbre, ondeaba algo que no llegó a visualizar bien por carecer de unos prismáticos. Dicho y hecho, José Luis Pardos llamó a uno de sus varios amigos con los que cuenta en nuestro pueblo, Juan Antonio enfermero gerontologo de nuestro Hospital ciezano y le rogó si no podría cumplir con su promesa de ayudarle a subir a la cumbre de la Atalaya, para probar su capacidad, otear y conocer mejor el horizonte. Dicho y hecho una vez mas, la amabilidad de Juan Antonio Salmerón se hizo presente con la ayuda de su hermano Jesús, del Parque de Bomberos de Cieza y Francis su hermano mayor. Entre los cuatro y por los debidos vericuetos se inició la subida y don Jose Luis pudo no solo contemplar la maravilla de nuestra ortografía, geología y geografía sino que se hizo múltiples fotos entre las que se cuenta la incluida en esta Nota para confirmar la realidad de su proeza.